HOLA!! Somos Cristina Casado Gómez, Mª Jesús Fernández Relaño, Mª José Galván Vivas, Magdalena Mª García Flores y Melody Vázquez Suárez. Esperamos que os sirva nuestro blog.



sábado, 14 de mayo de 2011

BIBLIOGRAFÍA

1.      Romero Ruiz A, Molina Ruiz D, Gómez Salgado J, Barroso Orta M J. Introducción a la hematología. Citología Hematológica. Componentes celulares de la sangre. La hemoglobina y el hematrocrito. Toma de muestras sanguíneas. En: Molina Ruiz D, Gómez Salgado J, Bennasar Veny M. Cuidados en laboratorios de Bioquímica, Hematología, Hematoterapia y Hemodonación. Madrid: Enfo Ediciones; 2008. P.169-188.

2.      Thibodeau, Patton. Unidad IV Transporte y defensa. En: Thibodeau, Patton. Anatomía y fisiología. Madrid: Mosby; 2000. P. 442-545.

3.      Romero Ruiz A, Molina Ruiz D, Gómez Salgado J. Anemias: conceptos y clasificación. Diagnóstico de laboratorio. Pruebas específicas. En: Molina Ruiz D, Gómez Salgado J, Bennasar Veny M. Cuidados en laboratorios de Bioquímica, Hematología, Hematoterapia y Hemodonación. Madrid: Enfo Ediciones; 2008. P 217-244.

4.      Lewis S M, Bain B J, Bates I. Técnicas Hematológicas Básicas. En: Lewis S M, Bain B J, Bates I. Dacie  y Lewis Hematología práctica. 10ª Edición. Madrid: Elsevier; 2008. P. 24-50.

5.      Gámez Gómez I, Porrino Herrera M C, Ibáñez Moya A. Fisiología de la hematopoyesis y factores de crecimiento hematopoyéticos. En: Cobo Martínez F, García Bautista J A. Hematología. Del laboratorio a la práctica clínica. Jaén: Formación Alcalá; 2010. P. 17-28.

6.      Romero-Ruiz A. Los desórdenes metabólicos en Hematología. Enfermería Docente 2002; 76: 35-40.

7.      Vives J L, Aguilar J L, Pujades J. Métodos citoquímicos de estudios leucocitarios. En: Vives J L, Aguilar J L. Manual de Técnicas de laboratorio en Hematología. Barcelona: Masson-Elsevier; 2006.

8.      Romero-Ruiz A. Los desórdenes metabólicos en Hematología. Enfermería Docente 2002; 76:35-40.

9.      Díez de Celis C, Martínez Brotons F. Alteraciones de la hemostasia. En: Fuentes Arderiu X, Castiñeiras Lacambra MJ, Queraltó Compañó JM. Bioquímica clínica y patología molecular. 2ª Edición. Barcelona: Reverté; 1998. P. 1013-1034.

10.  Romero Ruiz A, Molina Ruiz D, Gómez Salgado J. La Hemostasia. Estudio de la función plaquetaria. Determinaciones analíticas básicas: medición de vía intrínseca y vía extrínseca. El fibrinógeno. Dosificación de factores de coagulación. La fibrinólisis. Trombofilia. En: Molina Ruiz D, Gómez Salgado J, Bennasar Veny M. Cuidados en laboratorios de Bioquímica, Hematología, Hematoterapia y Hemodonación. Madrid: Enfo Ediciones; 2008. P 189-216.

11.  Vives J L, Aguilar J L, Pujades J A. Metodos de recuento de las células sanguíneas. En: Vives J L, Aguilar JL. Manual de Técnicas de laboratorio en Hematología. Barcelona: Masson- Elsevier;2006

12.  Romero Ruiz A, Molina Ruiz D, Gómez Salgado J. Automatización en el laboratorio: recuentos celulares, velocidad de sedimentación globular. Pruebas de hemostasia. En: Molina Ruiz D, Gómez Salgado J, Bennasar Veny M. Cuidados en laboratorios de Bioquímica, Hematología, Hematoterapia y Hemodonación. Madrid: Enfo Ediciones; 2008. P 303-332.

13.  Romero Ruiz A, Molina Ruiz D, Gómez Salgado J. Anomalías oncohematológicas: diagnósticos de laboratorio. Citoquímica. Citometría de flujo. Biología molecular. En: Molina Ruiz D, Gómez Salgado J, Bennasar Veny M. Cuidados en laboratorios de Bioquímica, Hematología, Hematoterapia y Hemodonación. Madrid: Enfo Ediciones; 2008. P 333-353.
LOS PROCESOS ONCOHEMATOLÓGICOS

Se pueden definir las enfermedades oncohematológicas como aquellos procesos neoplásicos que afectan al tejido sanguíneo, sus precursores y/o componentes (6).
Destacan en este grupo cuatro divisiones de enfermedades:
1.      Leucemias
Enfermedad neoplásica que afecta a precursores sanguíneos, se pueden clasificar en leucemias agudas y crónicas.

1.1. Leucemias agudas
Son cuadros anatomoclínicos de etiología desconocida, caracterizado por la proliferación incontrolada de células sanguíneas inmaduras que invaden la médula ósea, sangre periférico y otros órganos. También es característico el fracaso de la función de la médula ósea normal.
Éstas se clasifican a su vez en:
-          Agudas mieloides o mielocíticas (LMA).
-          Agudas linfoides o linfoblástica (LLA).

1.2. Leucemias crónicas
Este tipo de leucemias presenta una evolución más pausada que las agudas, aunque también pueden tener una evolución igualmente mórbida.
Se pueden clasificar en:
-          Leucemias crónicas mieloides.
-          Leucemias crónicas linfoides.

2.      Linfomas

Neoplasia maligna que afecta al tejido linfático fundamentalmente a los ganglios. Existen dos grandes grupos de linfomas, los linfomas tipo Hogdkin y los linfomas tipo no Hogdkin.

3.      Gammpatías Monoclonales
Son neoplasias que afectan a las células plasmáticas, alterando su correcto funcionamiento y provocando una inadecuada producción de anticuerpos.

4.      Síndromes Mielodisplásicos

Son afectaciones medulares caracterizadas por una inefectiva hematopoyesis, lo cual ocasiona una serie de desórdenes metabólicos que pueden llegar a dar lugar a una LMA.


MÉTODOS DIAGNÓSTICOS EN LOS PROCESOS ONCOHEMATOLÓGICOS

Para el diagnóstico de los procesos mencionados anteriormente es necesario  que la clínica sea contrastada previamente mediante técnicas y procedimientos de laboratorio. Además de los recuentos sanguíneos mencionados anteriormente también existen otros tipos de procedimientos.

  • Punción de Médula Ósea

Es la técnica más empleada para el estudio de las patologías antes mencionada. Este estudio se puede realizar en dos vertientes, a nivel morfológico o funcional. El primero consiste en el examen microscópicos de los precursores hematopoyéticos y el segundo estudia los progenitores mediante un cultivo in vitro.

  • Estudio de Citoquímica

La citoquímica trabaja a partir de tinciones (de médula ósea o de sangre periférica). Estas tinciones se clasifican en: panópticas y diagnósticas. Con las primeras se observa la morfología de la población celular de la sangre periférica o de la médula. La segunda se centra en reacciones químicas que revelan la presencia o no de determinadas líneas celulares.
Las técnicas más usadas son la tinción de hierro (azul de Prusia) en el diagnóstico de alguna anemia y estado de sobrecarga férrica, la mieloperoxidasa para discriminar entre población linfoide y mieloide y la fosfatasa alcalina granulocitaria, en el estudio de los síndromes mieloproloferativos (7).

MÉTODOS DIAGNÓSTICOS AVANZADOS: ESTUDIOS INMUNOLÓGICOS Y BIOLOGÍA MOLECULAR

Los anticuerpos mononucleares son muy empleados hoy en día en el diagnóstico hematológico, ya que permite la identificación de diferentes líneas celulares de morfología muy similar mediante el conocimiento de los antígenos fijados a su membrana.
Las técnicas que permiten su empleo se basan en la emisión de fluorescencia o en cambio colorimétricos. El método más habitual para conseguir esto es la inmunofluorescencia directa mediante citometría de flujo.
  • Citometría de flujo

Este principio está basado en la aplicación tecnológica que permite un flujo continuo de células y enfrentarlas a una o dos fuentes de luz para poder, por medio de fotodetectores, obtener información pormenorizada de cada una de ellas.
  • Citogenética

El estudio citogenético se suele realizar a partir de médula ósea,  aunque también puede ser utilizado en sangre periférica. Este método se emplea para la distinción entre leucemias crónicas mieloides con Cromosoma Filadelfia positivo y leucemias mieloides crónicas con Cromosoma  Filadelfia negativo estando demostrado que estas últimas tienen peor pronóstico cuando presentan una morfología atípica, pero no cuando esto no ocurre.
Las principales técnicas citogenéticas se basan en el estudio de las bandas de ADN que permiten la identificación de las posibles anomalías existentes.
  • Biología molecular

Dentro de la biología molecular las técnicas más empleadas  son la hibridación in situ, la reacción en cadena de la polimerasa, el análisis de microsatélites para el estudio del quimerismo.
La hibridación in situ permite visualizar el ADN o el ARN mediante su marcaje (encimático o fluorescente) y posterior análisis al microscopio de fluorescencia o al microscopio óptico. Permite estudiar anomalías cromosómicas en la metafase y en la interfase.
La reacción en cadena de polimerasa permite ampliar secuencias específicas de ácidos nucleicos, lo que puede proporcionar hasta un millón de copias de un determinado gen. El único impedimento es el hecho de que es obligatorio conocer la secuencia de ADN, al menos en parte, de la región del gen que se pretende amplificar.
En el análisis de microsatélites para el estudio del quimerismo  los microsatélites son fragmentos de ADN (no codificante) que están presentes en todos los individuos, pero que son muy variable o polimórficos entre los mismos.
           





LA HEMOSTASIA  


      Puede definirse como un proceso que se compone de un conjunto de mecanismos que actúan juntos para prevenir la extravasación sanguínea espontánea, evitar hemorragias excesivas y mantener la correcta fluidez del torrente sanguíneo. Es decir, permitir la prevención de la hemorragia espontánea y el control de la hemorragia traumática.
       La pared vascular y las plaquetas son los elementos básicos que comprenden la hemorragia. La constricción de los vasos sanguíneos lesionados favorece la adherencia y la agregación de las plaquetas dando como resultado un agregado plaquetario o trombo.Este trombo va a detener la hemorragia el tiempo que tarda en producirse la fibrina. Esta fibrina se adhiere al trombo formándose un coágulo.
      
Después de la hemostasia y la coagulación propiamente dicha tiene lugar la fibrinólisis, que es la encargada de digerir y así eliminar los depósitos de fibrina del organismo.
       Componentes de la Hemostasia

- Plaquetas: están compuestas por fosfolípidos y glucoproteínas. La función de las plaquetas va en relación con la función de la hemostasia, que son la prevención , detención de la hemorragia de la extravasación en el vaso no dañado, activación de los factores de la coagulación y retaracción del coágulo de fibrina.
- Factores de coagulación: son sintetizados en el hígado, por lo que necesitan vitamina K para el desarrollo de sus funciones fisiológicas.

 

FACTOR
ACTIVIDAD
DEPENDENCIA DE LA VITAMINA K
Fibrinógeno (FI)
 Sustrato final. Está en el plasma y es activado por la trombina.
No
Protrombina (FII)
Proteasa
Si
Tromboplastina tisular (FIII)

No
Calcio (FIV)
Ión
No
FV
Cofactor no enzimático. Son glucoproteínas termolábiles, están en la superficie de la membrana plaquetaria y es activado por la trombina y degradados por la proteína C activada.
Si
FVII
Proteasa
No
FVIII
Proteasa. Son glucoproteínas termolábiles, están en la superficie de la membrana plaquetaria y es activado por la trombina y degradados por la proteína C activada.
No
FIX
Proteasa
Si
FX
Proteasa
Si
FXI
Proteasa
No
FXII
Proteasa
No
FXIII
Transglutaminasa. Está en el plasma y activado por la trombina.
No
Precalicreína
Proteasa. Síntesis de cininas vasoactivas.

Cininógeno APM
Cofactor no enzimático. Síntesis de cininas vasoactivas.
No


-   Sistema fibrinolítico: se encuentra formado por los inhibidores fisiológicos de la coagulación. Algunos de ellos son la antitrombina o llamado también cofactor de la heparina, la proteína C, plasminógeno o la plasmina.

è Fisiología de la hemostasia


      La hemostasia primaria como hemos dicho anteriormente es un proceso en el que está implicado la pared vascular y las plaquetas. En primer lugar se da una vasoconstricción local en el lugar de la lesión para que los trombocitos intervengan. A continuación se da la coagulación plasmática, en la que la sangre pasa del estado líquido al sólido mediante la transformación del fibrinógeno en fibrina, que forma una malla que encierra en su interior a los elementos celulares sanguíneos.

      Está compuesta por tres etapas interrelacionadas pero diferenciadas entre si:

       1. Activación de la protrombia. Esta es activada por medio de un complejo compuesto por el factor X, el factor V, los fosfolípidos de origen plaquetario y el ión calcio. La activación puede realizarse tanto por la vía extrínseca (requiere de la presencia de una proteína transmembrana) o por vía intrínseca.


       2. Formación de la trombina. Es activada por el factor X, que con la presencia de fosfolípidos, factor V y calcio es capaz de transformar la protrombina en trombina.Formación de la trombina. Es activada por el factor X, que con la presencia de fosfolípidos, factor V y calcio es capaz de transformar la protrombina en trombina.
       3. Formación de la fibrina. Una vez formada la fibrina se produce un monómero con una carga superficial diferente a la de la molécula de fibrinógeno que facilita su polimerización al instante. El factor XIII realiza la canalización de estos enlaces para poder evitar la poca estabilidad que poseen, convirtiéndose en insolubles en la urea.
      La cascada de coagulación está formada por dos vías: Extrínseca e Intrínseca, que al unirse, ambas vías forman la Vía Común, dándonos como resultado final fibrina entrecruzada que es la formadora del coágulo.



ESTUDIO DE LA FUNCIONALIDAD PLAQUETARIA


      --> Tiempo de hemorragia. Tiene como objetivo medir el tiempo desde la incisión de la piel hasta que la herida deja de sangrar. Pretende valorar la capacidad homeostática total en dicho momento. Para realizar esta prueba se necesita un esfingmomanómetro, este se gradúa en 40 mm de Hg y se coloca en el brazo del paciente. Y con una lanceta se realiza una incisión de aproximadamente 1 mm de profundidad en el antebrazo, la sangre se va secando con papel de filtro cada 30 minutos. En el momento de la incisión se activa el cronómetro. Si el tiempo aumenta más de 20 minutos se puede proceder a cortar la hemorragia. Los resultados normales oscilan entre 6 y 8 minutos, 10 se considera patológia y más de 20 minutos sería grave.

     --> Analizador de la función plaquetaria. A través de membranas de colágeno perforadas con adrenalina o ADP (Adenosín difosfato) se realiza una simulación in vitro de la función plaquetaria. Se obtiene el resultado midiendo el tiempo que el agujero de la membrana tarda en obstruirse tras pasar la sangre del paciente, que es inyectada por medio de una bomba. Lo normal sería que el tiempo en obstrucción de la membrana no sea mayor de 160 segundos.

       --> Estudio de la agregación plaquetaria. Para ello se necesita de plasma rico en plaquetas (PRP):

La sangre:


- 1º Se centrifura a baja velocidad (170 g 10 m) à PRP.


- 2º Se centrifuga a alta velocidad (3000g 20m) à PPP (plasma pobre en plaquetas)

       Se pone en una cubeta el PRP y agentes agregantes (ADP, sal sódica del ácido araquidónico o colágeno) y se atraviesa por un haz de luz. Este estudio se realiza en un agregómetro regulado a 37ºC y a una velocidad de agitación continua de 1100 rpm.

       --> Valoración del Factor Von Willebrand (VW). Esta valoración incluye una serie de pruebas:


- Agregación plaquetaria inducida por la ristoceina: es parecido al estudio anterior pero usando ristoceina, esta induce la agragación plaquetaria en presencia de VW.

- Factor VW: para esta prueba se emplea anticuerpos que van dirigidos hacia el factor VW, la normalidad se encuentra entre 50 y 150 U/dl.


- Cofactor de la ristocetina: las plaquetas lavadas, en presencia de ristocetina y factor VW se aglutinan más si existe factor VW. Es una técnica exhaustiva en el diagnóstico de este déficit. Los valores normales oscilan entre 50 y 150 U/dl.


- Otros métodos: son pruebas inmunológicas que se han desarrollado basadas en la capacidad de unión del factor VW al colágeno o a la glucoproteína plaquetaria IIb.

ESTUDIO DE LA COAGULACIÓN EN EL LABORATORIO.

      Su función más importante es el screening en estudios preoperatorios, y se realiza mediante diversas pruebas de laboratorio, estas se dividen en:

--> Pruebas rutinarias de laboratorio. Estos se dividen en tres fases, según el estado de la coagulación:

o Estudio de la vía extrínseca: Tiempo de protrombina (TP). Este estudio mide el tiempo que tarda la porción líquida de la sangre en coagularse. Para ello muestra deficiencias congénitas, adquiridas o inhibiciones de varios factores, como son el II, V VII Y X. Por otro lado, también mide el aumento del factor II. Por todo esto es trascendental para actuar ante el déficit del factor VII y para detectar diversas hepatopatías.

       Los valores normales en este estudio, rondan entre los 11 y los 14 segundos. Este tiempo será mayor en personas que toman anticoagulantes.

       Los resultados de esta prueba se expresan en Ratio, que se consigue dividiendo el tiempo de coagulación del paciente por el tiempo del control.


o Estudio de la vía intrínseca: Tiempo Parcial de Tromboplastina Activada (TPTA). Esta prueba mide el tiempo que le toma a la sangre coagularse. Para la realización del estudio se utiliza tromboplastina a la cual se le ha extraído el factor hístico, con lo cual, está compuesta por una gran cantidad de fosfolípidos y un activador de contacto.

       Los valores normales están entre 25 y 35 segundos.

       Los resultados de esta prueba, al igual que los de la anterior se expresan en Ratio.


o Estudio de la fase final de la coagulación: Tiempo de Trombina y Dosificación de Fibrinógeno. Con esta prueba se estudia el momento en el que se forma el coágulo, esto se realiza mediante dos pruebas:

                 § Tiempo de Trombina. Esta prueba se realiza añadiendo trombina al plasma, la cual actúa sobre el fibrinógeno del paciente, transformándolo en fibrina y provocando de esta manera el coágulo.

       Para excluir la presencia de heparina en lugar de esta técnica se utiliza el tiempo de Reptilasa, con esta técnica se añade al plasma una suspensión de veneno de serpiente en lugar de trombina.

                 § Dosificación de fibrinógeno. Esta técnica se utiliza cuando los valores del Tiempo de Protrombina o del Tiempo Parcial de Tromboplastina Activada se encuentren elevados, así como ante la sospecha de una coagulación intravascular diseminada (CID).

      Los valores normales de fibrinógeno en sangre rondan entre 150 y 450 mg/dl, se debe realizar varias determinaciones seriadas, para que estos valores no se vean afectados por ningún factor.

      El método más preciso para realizar esta técnica es el de Clauss, que va a determinar el fibrinógeno funcional.

--> Pruebas especiales: determinación de factores. Estas pruebas se realizan cuando se presenta un sangrado inexplicable y además se observan alguna alteración en las pruebas anteriores, ya que puede haber un déficit o una inhibición de los factores de coagulación. Estas pruebas son:

o Factores estudiados con el PT (II, V, VII y X). Los valores normales de estos factores oscilan entre 80 a 120 U/dl.

o Factores estudiados con el TPTA (VIII, IX, XI y XII).Los valores normales del factor VIII ronda entre 50 y 150 U/dl, para el IX es de 80 a 120 U/dl y por último es de 70 a 130 U/dl para los factores XI y XII.

o Estudio del Factor XIII. Este factor se encarga de estabilizar el coágulo de fibrina, haciéndolo insoluble en urea o ácido cloracético. Si este factor se encuentra ausente o presenta niveles bajos, el coágulo se mantiene soluble.

--> Pruebas especiales: Estudio de inhibidores. Cuando existe un alargamiento de los tiempos en la coagulación es debido a la presencia de anticuerpos que interfieren en el proceso de esta. Este tipo de anticoagulantes, puede ser de dos tipos:

o Anticoagulante lúpico. Estos son anticuerpos antifosfolípidos, que se asocian a trombosis y a abortos de repetición. Para demostrar la presencia de este anticoagulante se debe realizar las siguientes pruebas:

                 § Tiempo de Caolín. El procedimiento es el msmo que el del TPTA, pero se utiliza Caolín en vez de Tromboplastina.

      El plasma normal se coagula en menos de 120 segundos, si tarda más significa que el anticoagulante se encuentra presente.

                 § Tiempo de Veneno Víbora Russel. Se realiza la prueba en plasma problema y en plasma control, si el tiempo de coagulación del primero es más alargado que el del segundo, se realiza otra vez la prueba, pero sustituyendo el reactivo de cefalina del procedimiento por plaquetas. Si tras esta prueba en el tiempo de coagulación del plasma control se produce una corrección, entonces se trata de anticoagulante lúpico.

o Inhibidores específicos contra un factor de la coagulación. Estos son compuestos proteicos que se fijan al factor inhibiendo la parte del proceso de coagulación en la cual está implicado. Los factores más frecuentes son el VIII y IX, dentro de su rareza.


TROMBOFILIA
       Cuando hablamos de trombofilianos estamos refiriendo a los estados adquiridos, heredados o de ambos, que se asocian con un mayor riesgo de padecer trombosis arterial o venosa. Estos estados pueden clasificarse como:


-->Trombofilia primaria: tendencia genética a desarrollar trombosis debido, por lo general, a la resistencia a la proteína C activada. Dicha alteración da lugar a cuadros de tromboembolismo venoso, no existiendo evidencia de afectación a nivel arterial.

--> Trombofilia secundaria: Conjunto de trastornos adquiridos en los cuales existe mayor riesgo de desarrollar trombosis. También se incluyen los procesos tromboembólicos que resultan de la interacción de factores ambientales y genéticos.


INHIBIDORES FISIOLÓGICOS DE LA COAGULACIÓN
ANTITROMBINA III

       La antitrombina III es una proteína que se sintetiza en el hígado y que bloquea de manera natural la formación de coágulos sanguíneos, siendo el principal inhibidor de la trombina y el factor X activado. La deficiencia de esta proteína tiene causa genética, donde se produce una copia anormal de un gen de uno de los padres que posee la enfermedad, transmitiéndosela así a su hijo. Con frecuencia, dichas personas experimentarán la formación de un coágulo de sangre a temprana edad.

      Sin embargo, también existen otras múltiples causas que pueden causar déficit en dicha proteína, como son: sepsis, insuficiencia hepática, embarazo, heparina, ingesta de estrógenos, síndrome nefrótico, etc.

      En cualquier caso, se debe de sospechar de deficiencia de antitrombina III en individuos que presenten historia de trombosis ocurrida antes de los 40 años de edad sin factores predisponentes evidentes, como son trombosis familiar o resistencia a los tratamientos con heparina.

      El procedimiento para la valoración de dicha proteína consiste en añadir un exceso de heparina a la muestra de plasma diluido, formándose el complejo heparina-trombina. Posteriormente, se añade un exceso de trombina que será parcialmente neutralizada por dicho complejo, quedando una parte de trombina residual que actuará sobre el sustrato cromogénico liberándose nitroanilina (de color amarillo). Todo ello nos va a indicar que a menor cantidad de antitrombina III, mayor cantidad de trombina residual y; por tanto, mayor intensidad presentará el color.


       Los valores normales de la antitrombina III oscila entre el parámetro 80 – 120 U/dl. Los valores que indican un déficit congénito de la antitrombina III son concentraciones menores a 50 U/dl.

       PROTEÍNA C
       La proteína C es una glicoproteína vitamina K dependiente que se sintetiza en el hígado y que actúa impidiendo la coagulación sanguínea. El déficit de dicha proteína se debe principalmente a la herencia genética. En estas personas los síntomas más frecuentes que van a manifestar son el tromboembolismo venoso y embolismo pulmonar sobre la cuarta década de la vida. También este déficit de dicha proteína puede desarrollarse mediante procesos como la coagulación intravascular diseminada, hepatopatías, anticoagulación oral y en los postoperados.
La valoración de la cantidad de proteína C se hace mediante una técnica donde se necesita para la activación de la proteína C, el veneno de la serpiente Agkistrodon contortrix. La cantidad de proteína C se determina mediante su acción sobre el sustrato cromogénico.

      Los resultados normales oscilan entre 70 y 140 U/dl, mientras que un valor entre 40-50 U/dl nos indicará un déficit en dicha proteína.

PROTEINA S

      Es una proteína vitamina K dependiente que se sintetiza en el hepatocito, en las células y en las plaquetas. Su misión es actuar como cofactor no enzimático de la proteína C activada. El déficit de esta proteína se debe a una alteración que se transmite por la genética.
      En estas personas se pueden encontrar alguno de los siguientes defectos:

-->Tipo I: Déficit de la proteína S con una reducción de la cantidad de proteína S total.

--> Tipo II: Presencia de una cantidad de proteína S funcionalmente anormal.

--> Tipo III: Proteína S total antigénica normal pero con la presencia de antígeno y disminución de la actividad funcional de la proteína S libre.

      La actividad funcional de la proteína S se verá disminuida en los siguientes casos: periodo neonatal, embarazo, enfermedad hepática, CID, tratamiento con anticoagulantes orales, L-asparraginasa, tratamientocon estrógenos, episodios inflamatorios y epidodio trombótico agudo.

       La valoración de la determinación funcional de la vitamina S no se aconseja su realización en la actualidad ya que tienes riesgo de cometer un falso déficit, debido al estar mediatizada por el efecto inhibidor de la proteína C sobre el factor V y, en ciertos casos, debido a la mutación F V Leiden. Por todo ello, se aconseja realizar una valoración inmunológica, que consistiría en una técnica clásica denominada determinación por ELISA. Esta técnica consiste en determinar la proporción de proteína S, mediante la identificación de los anticuerpos monoclonales que actúan específicamente sobre la proteína S.

      Los valores que se consideran normales se mueven entre el parámetro de 70 – 125 U/dl, estando fisiológicamente disminuidos en la mujer, siendo éste de 50 – 110 U/dl.
FACTOR V LEIDEN (RESISTENCIA DE LA PROTEÍNA C ACTIVADA O RPCA)

El factor V es inactivado por la proteína C activada llevando a cabo una proteólisis sobre los residuos de arginina. Lo que reciba el nombre de Factor V Leiden es una mutación del gen del factor V que provoca la el cambio de la arginina por la glutamina, provocando entonces esa resistencia a la proteína C activada, siguiendo actuando el factor V con su actividad procoagulante normal.
Esta mutación es la causa más frecuente de trombofilia, más que cualquier déficit de la proteína C, S o la antitrombina III.

Ésta es una alteración genética que por sí sola incremente de 5 a 20 veces el riesgo de trombosis a largo plazo. Sin embargo, estos fenómenos trombóticos no tendrán lugar hasta que no se añada otro factor como son los anticonceptivos orales, la cirugía, embarazo, traumatismos, etc; es decir, que la trombosis no se debe únicamente a una sola causa, en este caso la mutación del factor V, sino que su aparición está relacionada con una importante red multifactorial.

La técnica que se utiliza para determinar la resistencia a la proteína C activada, consiste simplemente en añadir al plasma de muestra proteína C activada. El resultado se expresa en ratio y para considerarse normal debe superar un ratio de 2.

MUTACIÓN G20210A DEL GEN DE LA PROTROMBINA

       Esta mutación presenta una gran prevalencia en la población española y como su propio nombre indica, se trata de una mutación que provoca un incremento de la concentración plasmática de la protrombina, aumentando con ello el riesgo de sufrir una trombosis.       
       Este incremento de la protrombina plasmática se traduce a un aumento de la hiperactividad de la vía común de la coagulación.

HIPO Y DISPLASMINOGENEMIA
      Como ya sabemos, el plasminógeno es una glicoproteína que circula por el plasma que cuando se activa se transforma en plasmina. Bien, pues la deficiencia de plasminógeno se clasifica en dos tipos:

--> Tipo I: Insuficiencia en la síntesis, que se manifiesta por una reducción de su forma antigénica y funcional.

--> Tipo II: displasminogenemia, que consiste en deficiencias funcionales por alteraciones de la estructura molecular, manifestándose una disminución en la actividad funcional pero con valores normales de su forma antigénica.


DISFIBRINOGENEMIAS

       Existen dos mecanismos que pueden explicar la trombosis como consecuencia del mal funcionamiento del fibrinógeno:

--> Unión anormal entre la trombina y la fibrina anormal, incrementándose con ello los niveles de trombina.
--> Incapacidad de la fibrina anormal de ejercer un efecto estimulante al activador tisular del plasminógeno, dando lugar a una hipofibrinolisis.
   
       Dentro de la población afectada por esta alteración, el 25 % sufrirán sangrado, el 20 % tromboembolismo arteriovenoso y el resto de la población permanecerá asintomáticos. Un dato importante es que las mujeres que presentan esta anomalía, tendrán más riesgo de sufrir trombosis postparto y abortos.

       Esta alteración puede ser transmitida por herencia genética o bien puede ser adquirida por enfermedades hepáticas, L-asparraginasa, heparina, etc.









        ASPECTOS GENERALES DEL FUNCIONAMIENTO DE LOS CONTADORES HEMATOLÓGICOS AUTOMÁTICOS.
Actualmente se dispone de una gran gama de equipos en el laboratorio de hematología, como los auto analizadores, los cuales requieren una muestra pequeña con un mínimo de entre 20-50 µ preferentemente de sangre total anticoagulada con EDTA.
Por otro lado, se aconseja que los tubos de las muestras  estén cerrados para que haya una menor manipulación.
 RECOMENDACIONES PREVIAS AL INICIO DEL ANÁLISIS.
Antes de analizar la muestra hay que verificar aspectos como:
· Hay que comprobar los desechos biológico, y en el caso de que haya, vaciarlos.
· Comprobar el estado de los reactivos, preparando las cantidades suficientes.
· Limpiar las máquinas en el caso de que no tengan autolavado, comprobando la limpieza con el test en blanco.
· Coger una muestra conocida y del día anterior, conservada en la nevera, y procesarla comprobando los resultados.
· Emplear los preparados para el control interno.
Otro de los aspectos de suma importancia es la idoneidad de la muestra, teniendo en cuenta la cantidad y si el tubo es el correcto.
  • Control y calibración.

Cada equipo cuenta con un programa informático para el control de la calidad y donde el fabricante plasmará las características del producto.
La calibración consistirá en corregir las desviaciones comparando las cifras de referencia con las aportadas por el equipo.
Lo más importante a tener en cuenta respecto a los resultados es su exactitud y reproducibilidad. Los valores aceptables variarán en función del dispositivo empleado, pero aquellos en los que se supera un coeficiente de variación superior al 5%, no sería aceptable y hay que suspenderlos.
Además de comprobar la exactitud comparando los resultados con los de referencia, es importante también comprobar la repetitividad de los resultados mediante un control preparado por el propio laboratorio, procesándolo varias veces a lo largo de las jornadas.
  • Proceso de validación de la técnica.

  La automatización ha permitido asumir grandes cargas de trabajo y a conseguir resultados de calidad en periodos de tiempos más breves, pero queda incertidumbre principalmente en los resultados patológicos, de que algún dato no sea real, por lo que hay análisis que es necesario revisarlos.
  En la actualidad se dispone de unos sistemas expertos que permite validar de forma automática la mayoría de los resultados emitidos por los analizadores, y es el operario que manipula la maquina el que se encarga de validar la técnica.

RECUENTO DIFERENCIAL DE LEUCOCITOS.
La aparición de los instrumentos que interpretaban frotis sanguíneos se remonta a los años 70, siguiendo los criterios de microscopia óptica, pero fueron considerados equipos ineficientes, ya que no era proporcional los costos que suponían con las prestaciones que ofrecían.
Hoy día el Diff o fórmula leucocitaria (recuento diferencial o leucocitario) es realizado hoy día prácticamente por todos los analizadores.
En este recuento se puede suministrar 3 (Granulocitos, monocitos y linfocitos) o 5 poblaciones (neutrófilos, basófilos, eosinófilos, linfocitos y monocitos), además de información morfológica adicional.
Los resultados del diferencial proporcionado son de alta calidad, mirando hasta 200 el observador manual, y llegando a 8.000 los equipos con tecnología VCS.
En la actualidad el resto de parámetros hematológicos son suministrados por los equipos que ofrecen RDL automático, facilitando este la realización de los análisis y abaratando los costes.
  • Technicon.

Technicon fue el primero en desarrollar el primer equipo capaz de realizar un RDL, este equipo fue el Hemalog D, el cual realizaba el diferencial de 5 poblaciones, analizando el volumen celular y la medición de propiedades citoquímicas de los leucocitos.
Años más tarde esta misma casa, con le H-6.000, unió el diferencial leucocitario con el recuento de las tres series celulares.
Debido a las grandes dimensiones del Hemalog, se eliminaron todas la tinciones menos la peroxidasa (utilizada en neutrófilos y eosinófilos), y se empleaba el análisis de lobularidad con luz láser para identificar los basófilos, que esta además identificaba la presencia de neutrófilos en cayado; desarrollándose un parámetro denominado Índice de Lobularidad (IL).
En estos equipos, por lo tanto, se mezclarán los métodos ópticos y los citoquimicos (peroxidasa) para el diferencial leucocitario, y la luz láser para el recuento de eritrocitos y plaquetas.
Los equipos más actualizados de Technicon son los ADVIA, y son distribuidos por Siemens.
  • Beckman-Coulter.

Los herederos de estos métodos de impedancia son en la actualidad la principal empresa suministradora de analizadores hematológicos.
Los equipos Coulter, se encargan de la serie roja y trombocítica y del diferencial leucocitario de 5 poblaciones con tecnología VSC, siendo los modelos más actuales los de la línea LH.
Concretamente el LH 780 posee un software de calidad que da a los usuarios flexibilidad y mide la desviación de la amplitud de la población de eritrocitos para estudios como la anemia. El  nuevo paquete de control de calidad XM proporciona el peso exponencial (EWMA) del recuento celular completo (CBC), el diferencial de 5 partes, recuento de eritrocitos nucleados  (NRBC) y de reticulocitos.
  • Otros analizadores.

Aunque los dos mencionados anteriormente son los más comunes en el mercado actual, también existen otros como:
· Sysmex: el primero fue fabricado en 1963 con el nombre de CC-1001 y consistía en un  contador de glóbulos rojos. Estos equipos poseen un método único, el método de radiofrecuencia, que consiste en comprobar la capacidad que tiene el leucocito de emitir ondas de radio, pudiéndose diferenciar así las distintas poblaciones y el volumen. La citometría de flujo con láser semiconductor es utilizada para analizar las células blancas. En estos sistemas una dispersión a doble ángulo nos va a proporcionar dos tipos de información de los leucocitos:
§  Impulsos de dispersión en ángulo bajo informan sobre el tamaño celular.
§  Impulsos de dispersión en ángulo alto informan sobre la complejidad interna de la célula.
Para la detección y cuantificación de gránulos inmaduros en los glóbulos blancos para la determinación de una patología se utilizarán los equipos Sysmex de la serie X, y todo ello gracias a la tecnología de citometría de flujo fluorescente y al software que poseen. Con una tinción con tinte fluorescente Polimetina B, del ADN podremos comprobar el grado de madurez de los linfocitos.
· HORIBA-ABX: serie de analizadores que mezclan la citoquímica (tinción con negro sudán) y el diferencial con impedancia. Su aportación tecnológica es el doble enfoque hidrodinámico, con el que se puede obtener un análisis muy detallado del diferencial leucocitario. Lo más actualizado que ha sacado la casa es el recuento diferencial leucocitario (RDL) automatizado con tinción de las células de naranja  de tiazol combinado con lectura con luz láser a 0º y 90º y esto junto con la medición de resistividad permite obtener un RDL de 5 poblaciones, eritrocitos, granulocitos inmaduros, linfocitos atípicos y blastos. También puede leer muestras de médula ósea.
· ABBOTT CELL DYN: son equipos de larga trayectoria y el más avanzado en la actualidad es el CELL DYN Sapphire , que combina dispersión de luz óptica e impedancia, incluyendo la separación mediante difusión luminosa polarizada en diferentes ángulos, permitiendo el recuento de células sanguíneas y diferencial 5 partes con fluorescencia a tres colores. Para la detección de eritroblastosis se utilizará la citometría de flujo con detección en múltiples ángulos de dispersión de la luz. El único contador hematológico q puede procesar de manera automática los anticuerpos mononucleares es el Cell Dyn, permitiendo esto hacer un recuento en el laboratorio de los CD61 en 4 minutos y de CD3/4 y CD3/8 inmuno T.Cell (subpoblaciones linfocitarias) en 7 minutos.

EL RECUENTO DE RETICULOCITOS.
“Podemos definir a los reticulocitos como eritrocitos inmaduros que contienen en su citoplasma restos del ARN procedentes del núcleo celular ya destruido, que, en contacto conciertos colorantes precipita en forma de forma de filamentos o gránulos visibles al microscopio óptico”(11). Constituye el paso intermedio entre el eritroblasto y el eritrocito y su número en la sangre periférica es de suma importancia para la determinación de posibles patologías.

MÉTODO MANUAL DE RECUENTO DE RETICULOCITOS.
  Existen varias formas de hacer un examen microbiológico de las células hemáticas, siendo la más común la tinción con Azul Cresil Brillante o azul de metileno.
  Para realizar el examen es necesario sangre total anticoagulada con EDTA y una solución de azul de metileno al 1% en solución salina fisiológica añadiendo 0.4 gramos de citrato trisódico. Está recomendado emplear una parte significativa de la muestra de la sangre total y del colorante que se unirán en un tubo de hemodiálisis agitándose la mezcla suavemente e incubándose a 37ºC durante 15 minutos; con esto se prepararán tres frotis y se dejan secar. A continuación se llevará a cabo el recuento una vez realizada la tinción.
  Se colocará el objetivo a 100x y se busca una zona donde aparezcan unos 200 hematíes aproximadamente, identificando los reticulocitos existentes en dicha zona. Se deberán observar 2.000 eritrocitos (10 zonas aproximadamente de las comentadas anteriormente) y anotar el número de reticulocitos detectados.los reticulocitos vistos en proporción de los hematíes en porcentaje son en el varón sano 0.5-2.8% y en la mujer 0.2-2.5%. para corregir la muestra se emplea la siguiente fórmula:
Reticulocitos corregidos (%) = reticulocitos observados (%) x Hto    paciente/Hto normal

MÉTODOS AUTOMÁTICOS DE RECUENTO DE RETICULOCITOS
La citometría de flujo con la tinción es la manera más usual de contar los reticulocitos de forma automática, haciendo que se detecten las células al ser enfrentadas a la luz láser.
La medición se realizará empleando colorantes (fluorocromos): naranja de tiazol en el Technicon o azul de metileno en Horiba-ABX, entre otros colorantes.
Estos sistemas nos permite comprobar la intensidad de la fluorescencia de los reticulocitos, siendo los más jóvenes los que más fluorescencia tenga, ya que posee más ARN, siendo este dato de gran importancia ya que el grado de maduración de los reticulocitos ayudará en el estudio de la eritropoyesis.

ALGUNOS EJEMPLOS DE CONTADORES AUTOMÁTICOS DE RETICULOCITOS.
· ADVIA 120: mide simultáneamente los índices eritrocitarios y reticulocitarios. Los cuantificaciones que se obtienen son: el volumen reticulocitario (MCVr), la concentración corpuscular media de hemoglobina reticulocitaria (CHCMr) y el contenido de hemoglobina de los retículos (CHr). Unos valores de CHr<26 pg. indica que no se dispone de forma adecuada y normal de hierro para la eritropoyesis. También se mide la madurez del eritrocito viendo la capacidad para absorber que tiene (ya que estos pueden ser de alta, media o baja absorción), y si tiene más cantidad de ARN indica inmadurez.
· SYSMEX: estándar en recuento y determinación de reticulocitos. Emplea diodos de láser de Argón y citometría de flujo.
· COULTER: para el recuento de reticulocitos, utiliza 0,200 ml de azul de metileno precalentado para añadirle 0,031 ml de sangre total e incubarlo a 37ºC, para colorear el ARN y los ribosomas del reticulocito, separando aquello reticulocitos que nos ofrezca información fiable mediante la tecnología VCS (volumen, conductividad y dispersión de la luz láser).
 AUTOMATIZACIÓN EN EL LABORATORIO: RECUENTOS CELULARES, VELOCIDAD DE SEDIMENTACIÓN GLOBULAR. PRUEBAS DE HEMOSTASIA.

Actualmente, en los laboratorios de rutina existen unas dinámicas de trabajo en las cuales, para realizar  la mayoría de las técnicas la forma manual de trabajo  ha sido reemplazada por el trabajo de las maquinas. 

RECUENTO DE CÉLULAS SANGUÍNEAS.

Se puede definir como recuento de células sanguíneas, como la medida de la concentración de estas células  circulantes en la sangre,  junto a la concentración de hemoglobina (HB) y los índices eritrocitarios. Todos estos datos, constituyen el hemograma.

La técnica de recuento de células hemáticas ha experimentado un proceso de evolución a lo largo del tiempo, que la ha llevado de ser primordialmente manual (mediados de los sesenta) a ser una técnica realizada por maquinas. Para realizar el recuento manualmente se emplea una cámara cuenta glóbulos, la más habitual es la  llamada cámara de Neubauer. 



RECUENTO HEMATOLÓGICO MANUAL

            Para realizar el recuento hematológico manual se precisan una serie de elementos:

-          Sangre sanguínea venosa o arterial.
-           Líquidos de dilución.

-           Pipetas calibradas de dilución (Pipeta de Thomas). ---------------------------------------->
-           Cámara para el recuento celular.
-           Cámara para la incubación.
-            Microscopio óptico.

  • Recuento eritrocitos.

     En la realización de este recuento se emplea la cámara de Neubauer, en ella se cuentan los eritrocitos situados en los cuatro cuadros de las esquinas y el situado en el centro, en total hay 16x5=80 cuadradito. El resultado final de este recuento se obtiene multiplicando el número de eritrocitos contados por 10.000 y por diez elevado a 6. Para este recuento  se utiliza como líquido de dilución el líquido de Hayem, este se emplea para realizar una dilución de 1/200.  Por último, con la dilución se llena la cámara por capilaridad.

  • Recuento de leucocitos.

         En este recuento se emplea como líquido de dilución el líquido de Turk, para  poder realizar una dilución 1/20. A excepción de lo anterior, el proceso para llevar a cabo el recuento es el mismo que en el caso del recuento eritrocitario. A la hora de hacer los cálculos si existen diferencias, en este caso el recuento se obtiene multiplicando por 50 y por diez elevado a seis las células encontradas en la cámara de Neubauer y solo se cuentan los cuatro cuadrados de las esquinas.

  • Recuento de plaquetas.

       Este recuento se puede llevar a cabo tanto  en cámara como tras  un examen de frotis teñido con una tinción panóptica. El examen tras frotis es el más empleado, se denomina método Fonio y con él se obtiene una estimación indirecta de las plaquetas presentes en un frotis en relación con el número de hematíes.


RECUENTO HEMATOLÓGICO AUTOMÁTICO

     Como se ha mencionado anteriormente, con el progreso obtenido en la ciencia a través de los años también han progresado los métodos de análisis de las células en suspensión y han avanzado los adelantos informático; gracias a todo ello las maquinas empleadas en el laboratorio permiten soportar  grandes cantidades de trabajo cada día.

       El primer recuento celular sanguíneo automatizado se realizó en 1949, gracias al trabajo que realizado Wallace Coulter para el recuento de partículas. Coulter ideo un sistema que se centraba en el recuento de partículas mediante la detección de la diferencia de potencial  provocada por las células que pasaban individualmente por un orificio que separaba dos medios con carga eléctricamente diferente. (Esquema funcionamiento principio de coulter).


       Tras varios años de desarrollo y varias aportaciones importantes a este campo además de la Coulter, actualmente la base de los hemogramas automáticos son 3 procedimientos: la impedancia, la espectrofotometría con luz halógena y la dispersión de la luz láser.

  • Método de la impedancia.


         Este método se basa en la resistencia que ofrecen las células al paso de la corriente eléctrica cuando atraviesan un orificio de apertura que separa dos medios isotónicos con diferente potencial. Cada vez que una célula atraviesa el orificio mencionado, da lugar a un cambo de la resistencia eléctrica que es directamente proporcional a volumen de la célula que pasa. El impulso producido es recogido en un osciloscopio que, con los sistemas de filtro de interferencias, permite calcular el tamaño celular y trasladarlo a una curva de resultados. Este método es quizás el sistema más fiable para la medición de VCM.

Este sistema es capaz de realizar recuentos de las tres líneas celulares, gracias a que la maquinaria que se emplea para ello cuenta con dos aperturas de diferentes diámetros. La apertura de menor diámetro se emplea para el recuento de eritrocitos y plaquetas, mientras que la de mayor tamaño se emplea para el recuento de leucocitos.

En lo referente a la serie roja, gracias a este método se obtiene tanto el número de células que tiene el paciente, como el tamaño medio de las mismas. Además, se dispone de una curva que comprende desde la célula más pequeña hasta la más grande. Ello nos aporta la información del Ancho Distribución Eritrocitaria, indicador de anisocitosis. Este método también permite calcular la hemoglobina.

Con respecto a la serie blanca, este método permite obtener hasta 3 subpoblaciones leucocitarias diferentes (linfocitos, monocitos y polimorfonucleares), aunque da una información meramente informativa.

  • Método dispersión lumínica.


      Este método consiste en analizar el efecto que sobre un haz de luz monocromática de alta intensidad (láser) ejercen las células, al cruzarse una a una en su trayectoria. El lugar donde se produce el encuentro entre las células alineadas y la luz láser recibe el nombre de célula o cámara de flujo.

La dispersión lumínica se detecta mediando dos sensores, uno de ángulo grande (fotomultiplicador) y otro de ángulo pequeño (fotodetector). El fotomultiplicador detecta la dispersión lumínica lateral, su intensidad es directamente proporcional  a la complejidad de dicha estructura. El fotodetector detecta la dispersión lumínica frontal,  su intensidad es directamente proporcional al tamaño celular. La información de ambos es recibida por los ordenadores presentes en los equipos y estos van a expresar los datos obtenidos de tres maneras:

- Datos numéricos: Es la representación cuantitativa del análisis realizado. Permite realizar recuentos de serie roja, plaquetas y series blanca.
-         Histogramas: Son representaciones gráficas.
-         Citogramas o scattergramas: Son representaciones gráficas multiparamétricas. Se refieren al recuento diferencial leucocitario o a la serie roja.

  • Tecnología VCS.


       Este método se basa en la aplicación de tres principios físicos relacionados con la célula: su volumen (V), determinados por la impedancia, la conductividad (C) medida por la capacidad de transmisión de ondas de alta frecuencia por el citoplasma células y la dispersión de la luz láser.

-       Volumen. Se emplea para la determinación del volumen total celular. Cuando una partícula celular irrumpe el paso de la corriente eléctrica entre dos electrodos, la cantidad de corriente interrumpida indica el tamaño (volumen) de la célula.
-       Scatter. Un láser emite luz de una intensidad fija que permite evaluar la superficie celular. Si la luz incide sobre una célula de superficie lisa, como un linfocito, la reflexión detectada por el sensor será muy baja; pero si la célula posee una membrana celular rugosa o con proyecciones, como los granulocitos, la luz se vera altamente dispersada hacia el sensor. Además, el número y posición de los gránulos en el interior de la célula influirá sobre la manera en que se disperse la luz.
-       Conductividad. Gracias  al empleo de una corriente eléctrica de alta frecuencia que atraviesa  la célula, se adquiere información sobre la complejidad y características del núcleo celular y del citoplasma.

Por lo tanto, la tecnología VCS nos proporciona información de 3 tipos y con ella se puede realizar un grafico de 3 ejes que conforman un cubo, dentro de este hay un número elevado de cubitos pequeños. El sistema informático que recoge la información de cada célula que pasa la envía a cada uno de estos cubitos que conforman la imagen de la series blanca suministrado por estos equipos.

  • Método de la fluorescencia.

          Este método se desarrollo gracias a la capacidad de las células de emitir fluorescencia al unirse con un fluorocromo. La base de este método esta en la excitación del fluorocromo por una fuente de luz láser, que emite una luz de longitud de onda conocida y,  por tanto, identificable. Cada célula emite una señal luminosa que es recogida por detectores y transformada en información tras su procesado informático. Una de las utilidades de procedimiento es la identificación celular por citometría de flujo.